lunes, julio 14, 2008

Fernando Niembro o las características innatas del periodismo



"Periodista: Hay una clara preferencia de su parte hacia los jugadores que juegan en el exterior respecto de los que lo hacen en la Argentina. La prueba es que usted llevó a Simeone sin alcanzar la plenitud luego de la lesión y le dio dos posibilidades de recuperación a Caniggia, quien finalmente no jugó ni un minuto...

Marcelo Bielsa: Simeone había vuelto a jugar en su club antes del Mundial. Eso es así. Yo elegí a un Caniggia vigente y sano. Y descarté a un grandísimo jugador, Saviola, en una posición que entendí que había otra opciones.

Periodista: Yo lo que quiero discutir, señor, es la plenitud de un jugador para jugar un Mundial. Entre un Caniggia que tiene dos lesiones consecutivas y usted le extiende la chance y un jugador que sea el 70% de Caniggia pero esté en plenitud... Digo Saviola, un jugador que ha tenido la chance. No sé...

Marcelo Bielsa: Sí, ésa es la verdad. No sabe."

Extracto de una conferencia de prensa entre Bielsa y un grupo de periodistas.

Alguna vez Omar Orestes Corbatta, el mítico win argentino que terminó alcohólico viviendo debajo del estadio de Racing, dijo que el periodismo era una mierda porque "te alaba cuando estás arriba y te hunde cuando estás abajo". Esto es totalmente cierto y atañe a una de las características más espantosas del periodismo en general (y el deportivo en particular): su capacidad de hacer daño, de construir verdades, de manipular y maniatar la realidad. En general, me parece que cuando se pretende criticar esta actividad éste es el punto que más se toma en cuenta, las malas intenciones, pero hay otra arista igual de profunda y constante: la ignorancia. Y en el periodismo la falta de conocimiento está camuflada por la información; los datos banales y simples que manejan los periodistas parecen conocimiento, pero son sólo expresiones de la falta de reflexión y exploración con la que acometen el análisis de cualquier fenómeno. Porque esa es la característica central del periodismo: solamente rumiar de la superficie de la realidad, de los sedimentos de mentiras, inventos, prejuicios, lugares comunes que se han hecho sentido común y parecen realidad.

Esta característica, constante en todo el medio comunicacional, en el periodismo deportivo llega a lugares de espanto. Más ignorancia, más lugares comunes, más desubicación. Esto sucede, me parece, porque existe una distinción valorativa entre el trabajo y el ocio. Todo lo que tiene que ver con lo productivo (que incluye el poder político entre sus actividades) es más importante que lo que está relacionado con las actividades del tiempo libre, espacios marginales de la verdadera acción social. Así, al más incapaz de los reporteros se lo manda a cubrir las declaraciones de los futbolistas, al menos apto para analizar se lo manda a escribir un comentario sobre un partido. El fútbol está cagado, le mandan al peor de los peores.

En Bolivia hay muchos indicadores de este fenómeno. Desde la ignorancia de Toto Arévalo hasta el amarillismo de Juan Pastén pasando por el ofensivo desconocimiento y poserio de Fernando Berdeja. Sin embargo, hoy me ocuparé de Fernando Niembro, debido a que este personaje posee una aureola de conocimiento y sabiduría a su alrededor, y es una de las voces autorizadas sobre el fútbol en el continente.

Anoche, 10 de julio de 2008, entrevistó a Thierry Henry en su programa "La última palabra". Ya antes, con otros personajes como Borghi, Batista y Bauza, Niembro había demostrado su incompetencia para hacer una entrevista decente. Los personajes tejen hilos, profundamente reflexivos y seductores, sobre este complejo juego que es el fútbol y Niembro se encarga de destrozarlo todo y volverlos a lo simple con inocuas preguntas. Pero ayer fue el colmo. Henry puede deber muchas cosas en la cancha (falta de coraje, perfil de "arrugeti", cierta negligencia) pero tiene una mirada lúcida sobre el fútbol y vivencias que pueden alumbrar el camino que transita este deporte actualmente. Pero con Niembro al frente es imposible transitar por esos derroteros.

Henry empieza a hablar sobre un fenómeno extraño: tienes un equipazo (como Francia en el mundial del 2002) y no puedes jugar bien. Elucubra, piensa, analiza y Niembro lo corta: "¿Ni siquiera se puede jugar bien con estas zapatillas?", burdo guiño a sus sponsors que derrumba toda la construcción analítica que esbozaba el futbolista. No, ignorante, esas zapatillas juegan solas. Henry empieza a discurrir sobre los inasibles meandros de la derrota, sobre perder un mismo año la final de la Copa del Mundo y de la Champions League y Niembro le pregunta: "¿Te sentiste triste cuando perdieron la final en Alemania". No, burro, fue el mejor día de su vida.

En el fondo está la simplificación total de toda la realidad. Buscar los lugares comunes y las sentencias concluyentes. Porque para el periodismo lo importante es la certeza (aunque sea burda e ingenua) por sobre la duda, la complejidad y la reflexión. Su bandera es la constatación de todas las verdades que signan la vida colectiva contemporánea, fortalecer los barrotes que encierran nuestra forma de actuar en sociedad. Junto a los abogados y los médicos son las tropas de élite de nuestra manera de habitar el mundo. Algo de esto habrá estado pensando Henry cuando en un momento de la entrevista hablaba sobre la muerte y le dijo a Niembro: "A todos nos va a llegar, pero me parece que algunos, como tú, tienen posibilidades de que llegue antes".

8 comentarios:

Varios dijo...

Mario, adscribo plenamente cada uno de tus palabras críticas hacia el periodismo deportivo. Y añado alguito:

El periodismo deportivo, y el periodismo en general traba como como si tuviera la función de hacer todo más previsible. La noticia siempre es una irrupción, ocurren hechos de lo más variados, se ostentan posiciones de una riqueza abismal que recrean la tradición del suspenso, de la intriga, del complot y la amenaza; y, sin embargo, por su regularidad formal, su previsibilidad, su pereza enunciativa, el periodismo siempre es idéntico a sí mismo: lo uno repetido 354 veces por año, una suma cero de carácter industrial.

El Periodismo Deportivo con la impostura de causar polémicas de Niembro son parte de esa espantosa previsibilidad de carácter industrial.

Un fuerte abrazo Mario...

Mario Murillo Aliaga dijo...

Cristian:

Es totalmente cierto tu apunte adicional sobre el periodismo deportivo. Creo que es bastante claro cuáles son las formas y características del mismo, ahora toca mostrar particular y detalladamente cómo funcionan sus protagonistas. Ponerlos en evidencia, mostrar lo mediocres que son. Estoy pensando hacer un articulito de "nuestros" periodistas (Toto, Pastén y Berdeja principalmente). A ver si te animas a darme una mano y lo hacemos a cuatro manos.

Un abrazo,

Mario.

(Diego Loayza) Oneiros dijo...

La crítica debería extenderse al mundo mediático en general y a nivel global. Ese asunto de la "muñeca" como única vía a cargos de "importancia" que tanto nos abruma en el ámbito nacional, se multiplica exponencialmente en el ámbito internacional donde se juegan muchos millones y, supuestamente, debería haber un alto estándar de expectativas como para discriminar los buenos de los mediocres. No hay tal. Parece que estamos entrando en una tiranía de la mediocridad. En nuestro país, el tema pasa de alarmante a hilarante. Creo que el mejor ejemplo fue nuestra compatriota que comentó en una entrega de Oscares respecto al Laberinto del Fauno de Gullermo del Toro. "Es una vergüenza, decía la especialista, que nos manden películas dobladas a Bolivia y más vergonzoso aun es que lo hagan con ese pésimo doblaje que caracteriza a los españoles". Eso lo dice todo.

Saludos.

Mario Murillo Aliaga dijo...

Cholito:

Totalmente de acuerdo, este tema se puede observar tanto a nivel mundial como a nivel del periodismo en general.

Está buena tu anécdota del "Laberinto del fauno". Ahí va otra. El otro día fuimos a ver The Strongest vs. Oriente Petrolero. El arquero de Oriente cometió un grueso error que le costó la victoria al equipo. Incluso, en las declaraciones posteriores pidió disculpas a sus compañeros por el error, sin embargo para la transmisión radial de Quique Rivera fue el mejor jugador del campo. Él y todo su equipo (noteros, comentaristas y demás bichos) coincidieron en que fue la figura del partido¡¡¡ Ya no es cuestión sólo de ignorancia, ya ni siquiera pueden ver el fútbol, son unos asnos.

Saludos,

Mario.

Iñaki Arbeloa dijo...

Ni una coma le cambiaba. Y suscribo casi todas las afirmaciones. Si las suscribiera todas, no sería Iñaki...

Abrazos Frichi...

Alvaro G. Loayza dijo...

Frichi, mira. Uno está contento, Argentina le acaba de ganar 3-0 a Brasil, uno sigue contento hasta que sintoniza Fox Sports y le ve la cara al subnormal de Gustavo López, hijo opa de Niembro, experto en hablar pelotudeces tamaño baño, a los 20 segundos de escucharlo el está loando lo increíbles que son los jugadores argentinos olímpicos y lo chatos que son los brasileños y se larga la gilipolles del día: "Robinho y diego están cansados de perder con Argentina", literal. Se nota que este huevonazo y tarado sujeto no se ha enterado que Robinho, por sólo citar dos de los últimos enfrentamientos, ha estado presente en el 4-1 de la Copa Confederaciones el ´05 y el 3-0 de la Copa América el ´07, que por lo visto el señorito López no se ha enterado que Argentina fue no derrotada, sino vapuleada por Brasil. ¿Cuándo y dónde, pregunto, es que Robinho se ha cansado en perder con Argentina, justo que ahora que Argentina gana el no está en la escuadra verdeamarelha? ¿No será que el que está cansado de perder contra Brasil es Riquelme, quien pese a jugar un partido pésimo se dio el gustito ahora en la Olimpiada?
Relamente si lo que quiere pregonar el periodismo argentino con su estupidez mezclada con su total carencia de datos y de perspectiva, es dejar a toda Sudamérica hinchando por cualquiera excepto por Argentina, se pueden dar por satisfechos porque los están logrando, y si lo segundo que quieren es hacer ver que las olimpiadas son más importantes en fútbol que el mundial, la copa américa y la copa confederaciones porque Argentina ganó en Atenas y está en la final de Beijing, pues no, no lo están logrando, porque no somos subnormales y sabemos que esa exaltación de la olimpiada (sin quitarle su cabal importancia) sólo se debe a que Argentina no gana nada de lo otro desde el ´93. Que pena que las gambetas de Messi, la personalidad de Mascherano o la verticalida de Di María se tengan que empañar por las distorsionadas y mentirosas imbecilidades de Lópes, Niembro y otros esbirros.

Mario Murillo Aliaga dijo...

Gracias querido Iñaki, un abrazo. No sabes cómo se te extraña por estas alturas (principalmente en las noches paceñas cacho, singani y catarreo).

Alvarex, comparto totalmente tu indignación con el asno de Gustavo Lopez. Recuerdo que hace un tiempo, en la misma vena de las afirmaciones que tú citas, afirmó que "Boca y River son los equipos más grandes de Argentina". ¿¿¿Cómo??? ¿Un equipo, River, que no ha ganado hace más de diez años un título internacional es el más grande de América? Sólo eso puede ser cierto en el chauvinista razonamiento de Lopez. Es que creo que en el caso del periodismo argentino hay un sindrome particular. Por un lado, comparten todos los vicios del periodismo deportivo en su conjunto (los que menciono en el artículo) pero le suman, por otro lado, ese ego desmedido que ha hecho que mucha gente los odie y desprecie por toda latinoamérica. Y te lo dice un argentinófilo consumado, pero casos como Niembro y Lopez muestran que ese ego existe y está más profundo que nunca. Quiero terminar mencionando dos excepciones: el gran Varsky y los comentaristas que transmitieron la última gesta de los Pumas. Gente que te muestra que se puede combinar el análisis, la emoción y el orgullo patrio de manera absolutamente satisfactoria.

Anónimo dijo...

Mario

Estoy muy preocupado por lo que el periodismo en general esta haciendo en nuestro país, sobre todo.
Vivimos en un tiempo en que la historia se esta cobrando los errores que nuestros antepasados cometieron, pero gracias a la tecnología de la comunicación esta “etapa histórica”, que debería ser mucho mas lenta y tediosa, esta pasando muy rápidamente. Este problema no nos deja reflexionar, porque no estamos acostumbrados como especie a este ritmo evolutivo y no nos deja reaccionar objetivamente como sociedad, sobre los sucesos que van a venir, aunque estoy seguro que no va a pasar nada, para variar...
Yo creo que en el futbol esto es peor, porque los periodistas son gente que vive de la critica a un deporte, cuando en el fondo debería ser la critica a un arte.
En realidad los periodistas son igual que los pacos, unos cojudos “pide plata” que con 2 pesos los haces hacer lo que quieras.


Un besote desde SC

OSO